Hay pequeñas cajas de recuerdos
bajo mi almohada,
hace 22 años atrás
cuando nací
y el primer rayo de sol ya me advertía
que el viejo blues siempre acechaba
siempre acechaba las rosas recién cortadas
y las cosas por nacer.
Y en esas cajas de recuerdos
donde no quiero olvidar,
siempre quiero retener
como rocas
al fondo del mar, guardar
un espacio donde quizás fui feliz
o donde quizás alguien me quiso
en otro universo. Igual al mío.
Pero alguien me quiso.
Alguien me ama ahora,
y cada pieza de su dulzura
la conservo en mis cajas,
cada vez que me dibuja
melodías aéreas. Allí las conservo
como un almanaque mínimo.
Y mi primera cosa, un pequeño barco
de papel celofán,
o quizás un maullido de gato,
sé que está allí
y me ayuda a soñar cada noche,
cada paso y cada respiro,
cada una de esas cosas
soy yo en mi tiempo.
Y también estás tú, si me
hiciste daño o si diste a mi día
controversia para un pensamiento,
una balada breve de aliento,
o un siglo en que saber nada
y que vale el intento.
Hay listas de cosas donde
cabe más que nada todo
lo que pisa el aire.
Hay pequeñas cajas de recuerdos
bajo mi sombra.
Bajo mi piel cientas más.
Detrás de mi trayecto por las calles de Santiago
en cada sitio que comparto,
en cada palabra que regalo,
en cada abrazo
que cumplo
y voz que encuentro,
recuerdo.//
bajo mi almohada,
hace 22 años atrás
cuando nací
y el primer rayo de sol ya me advertía
que el viejo blues siempre acechaba
siempre acechaba las rosas recién cortadas
y las cosas por nacer.
Y en esas cajas de recuerdos
donde no quiero olvidar,
siempre quiero retener
como rocas
al fondo del mar, guardar
un espacio donde quizás fui feliz
o donde quizás alguien me quiso
en otro universo. Igual al mío.
Pero alguien me quiso.
Alguien me ama ahora,
y cada pieza de su dulzura
la conservo en mis cajas,
cada vez que me dibuja
melodías aéreas. Allí las conservo
como un almanaque mínimo.
Y mi primera cosa, un pequeño barco
de papel celofán,
o quizás un maullido de gato,
sé que está allí
y me ayuda a soñar cada noche,
cada paso y cada respiro,
cada una de esas cosas
soy yo en mi tiempo.
Y también estás tú, si me
hiciste daño o si diste a mi día
controversia para un pensamiento,
una balada breve de aliento,
o un siglo en que saber nada
y que vale el intento.
Hay listas de cosas donde
cabe más que nada todo
lo que pisa el aire.
Hay pequeñas cajas de recuerdos
bajo mi sombra.
Bajo mi piel cientas más.
Detrás de mi trayecto por las calles de Santiago
en cada sitio que comparto,
en cada palabra que regalo,
en cada abrazo
que cumplo
y voz que encuentro,
recuerdo.//
2 comments:
Las cajas son algo muy importante en tu vida, por lo que veo.
Desde que eras niña (cuando me contabas que te escondías en cajas o muebles en tu casa), hasta tu último trabajo en la U. Cajas.
Y claro, también está esa linda cajita que me regaló alguien por ahí, y en la que aparece dibujado cierto ídolo de la música que tanto adoro.
Tu tb eres como una cajita de sorpresas, siempre con cosas nuevas que alegran mucho mis días... ^^
tambien tengo mis cajitas especiales, es bonito abrirlas y recordar...
Post a Comment