Ojos retirados al éxtasis de la confirmación
De un puñado de verdades fosilizadas.
Corro, sin descanso corro, con premura
Me oculto, como si el aire envanecido me hiriera,
Como si la muerte a mis pasos guiara
Y besara mis mejillas ausentes de plenilunios.
La fuga, mi propia fuga al bosque de mis
Sueños. Planeado en sueños.
Me uno a los fantasmas de las almas resilientes
Como dormida, como sedada
En mis propias tumbras sicológicas.
No dejes que deje de creer.
La inmensidad atmosférica me despierta.
Quisiera, ahora quisiera, poder quisiera
Ser el contraste perfecto pleno, en gloria,
Con la oscuridad.
¡No más sombría lluvia en mis pupilas!
Sacío mi famélica pobreza de respuestas
Bajo árboles que respiran en calma.
Y una a una, en secuencias preciosas
Descubro que la respuesta
Yace sencilla y desnuda en mi pecho.
Y el rocío de la luz crepuscular abriga esa
Esperanza, que aunque ciega y porfiada, que
Incluso puede ser falacia,
Recubro en pétalos rojos, no la dejaré
Fenecer.
No dejes que deje de creer.
La tierra amansa mis pasos frenéticos
En calmo danzar baleriano, digno de princesas.
Dame, le digo entonces, dame asilo y un amor
Al que asir mis pasiones destellantes y palpitantes.
Las búsquedas, mujer, te harán florecer.
Si no buscas, tu condena es ser solo un capullo y
Morir con la primera helada del invierno.
Deja a tus pálpitos guiar tu sangre.
Deja a la Luna sedar tus sueños en claroscuros
Y volverlos la savia ignota de tu alegría,
Purísima esencia de tu sonrisa.
Por favor, no dejes que deje de creer.
Creo en la magia, ave desvelada que migra
Rápido, a la primera mirada lacerante de
Escepticismo. Vuela a posarse en mitos urbanos
Que habitan en cimas nevadas y en cielos
Estrellados.
Magias sin artificio, sin podar por hechiceros,
Sin poder de convencimiento.
Hace que el alma se vuelva orgánica, que
Cante y vibre con los solsticios lunares,
Y los albores de las risas infantiles.
Que se alimente de la tibieza del amor.
Por favor, no dejes que deje de creer.
No necesitas, princesa, artilugio más sofisticado
Que el brillo sincero de tus ojos.
No necesitas, princesa mía, artefacto más simple
Que la música que emanan tus sonrisas.
Carente de conceptos, entenderás que eres feliz
Sin saberlo. No necesitas llegar a saberlo.
Porque, princesa,
Nada existe sin el placer de tu alma
Que se regocija ante el tornasol infinito del mundo.
Vive curiosa cuando camines bailando
Siempre pensando que tienes mucho en qué creer.
Que descubrir bajo mantos de
Indiferencia.
Por favor, te lo ruego. No dejes que deje de creer.
No dejes que silencie mi alma enamorada
De la vida compleja y sencilla
Entre las estrellas, bajo mi piel,
Entre la gente, bajo la tierra,
Bajo el sol, entre mi amado,
Entre las nubes, bajo la angustia,
Entre las sombras, bajo la lluvia.
Nunca dejes que deje de creer.//
Our CosmicBlueLand... you know...♥
1 comment:
Un poema que como un excursus vocea tanto que atrapa.Un poema que conmueve,envuelve...que dice que hace.Un poema que es todo un manifiesto.Precioso.Lúcido.Magisytal.
Abrazos
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