Primavera jugando con los rayos
del sol de invierno.
Inquieta despunta el velo bicolor,
verde y canela, caracoles dorados
y los entretelones en el pasto de las
hormigas de terciopelo.
El color de la primavera, se entrelaza
con la onda gélida y el hielo sobre
los techos. Primavera intrusa, primavera
que deja en ascuas la misantropía,
la metamorfosis de las alamedas
y la cosecha de melancolía en los ojos.
Entonces pude entender la rosa que
se anidó en mi iris, pude entender que se
encabritara el rojo cuando en derredor
blanco perpetuaba la ironía del silente
entre la cortina de gotas puntiagudas
y rostros sin retornar.
Primavera jugando con mi corazón
en calmo deshielo. Las abejas que
dejan su miel a mis pies, cruel trampa,
cruel trampa para que me quede enraizada
en la artificiosa circunstancia,
el no deseo, protección errada.
Pero tu color, primavera áltera,
tu color vibra en candidez y osadía,
pero soy confusa alimaña prodigando
por entre las calles irrestrictas, tu irrupción
es el desprecio de los terrestres a mi complexión,
y en suma, mísera, me deconstruyo mísera,
aunque sonría, sonría,
soy proscrita, proscrita ante tu invasión.
Oh, nunca seré digna discípula de tu color.
Primavera erudita, en colores edenésios,
evanescentes de pureza dibujada,
¡retrocede, retírate, retráctate!
Que debo vivir mi invierno de punta en blanco,
morir solo un poco, desollar la pasión
para ser mariposa de nuevo
cuando entonces sea tu momento,
de gloria tu propio momento.//
Sorry if I can appreciate your moments now.
If I cannot appreciate your spring.
It's not my fault. It's not your fault, either.
I don't know whose fault it is.
But surely it is not the right time.
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